19 de septiembre de 2009

ojillos

tienes ojillos... ojillos... tú ya me entiendes... y sabes que sin darme cuenta las lágrimas ajenas se me contagian y que si las veo a punto de salir en otros ojos se me ponen ojillos a mi...
si piangi... piango anche io... que me decía un gran amigo...
y hoy no he encontrado las palabras... algo tan simple como cuentame... hay días que no podemos decir las palabras... no cuando sabemos que hay confianza, y que el shushi quita un poco las penas... pero que solo las sacamos cuando queremos sacarlas...
así que intento poner ojos de estoy aquí... incluso si lo que quieres es que nos quedemos en silencio hablando de lo bien que hacen el sashimi en este japones... silencios que reconfortan... porque a veces lo díficil es precisamente eso... guardar silencio y esperar... cuando intuyes que las palabras se quedan en ese nudo que se hace en la garganta y que es imposible desatarlas... y guardo silencio... y espero... dándole vueltas a como hacer para que esas lágrimas desaparezcan...
solo estar... que es demasiado poco... y esperar en silencio... hasta que un día de estos, vuelvan las ganas de hablar...
***

6 comentarios:

  1. que suerte tienen algunas de tener con quien contar, alguien que llore nuestras lágrimas y que comparta nuestras penas y hasta nuestros silencios. Tú eres muy grande.
    Otras nos ahogamos en soledad, pero yo le hago caso a lunita y: sigo nadando, sigo nadando...
    Un beso.

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  2. sigue nadando... y haciendole caso a tu luna que te dije hace tiempo que es sabia con lo chiquitita que es...
    y ya sabes que si quieres que llore, o que te cuente tonterías para que nos riamos mientras lloramos (todo un arte...) me llamas y nos tomamos un algo...
    muchos besos cielet!

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  3. Con los años he comprovado que en ocasiones los silencios y la complicidad de la mirada dan justo lo que se necesita o incluso mas que las palabras.

    Me encanto el texto.

    un beso

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  4. tienes razón en que en ocasions los silencios y la complicidad dan a veces justo lo que uno necesita... pero sigo dandole vueltas a que ayer quizás pude decir algo mas... una sensación extraña...
    muchas gracias por pasarte!
    besos!!

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    Un saludo.

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  6. tú lo has dicho... "solo las sacamos cuando queremos sacarlas". a mí me pasa muchísimo... hay cosas que me cuesta decir, aún cuando tengo conciencia de que debería decir. pero no he aprendido a hablar por hablar... cuando realmente no me apetece. hay momentos en los que me bloqueo, no lo puedo evitar. pero quien te conoce sabe interpretar tus silencios, eso es un consuelo. muchas veces los ojillos hablan por sí solos... y seguro que los tuyos hablaron el otro día. estar no es poco... y llorar por empatía es la mayor prueba de apoyo y comprensión.
    muchos besos cielo!

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