17 de julio de 2009

dulces sueños

ni buenas noches ni dulces sueños... pesadillas de esas que no te dejan dormir, el silencio que te deja helada la columna en medio de este calor pegajoso de sábanas revueltas buscando el rincón que no ha tocado mi cuerpo... un trozo sin calor que dura un momento... silencio... de ese silencio que puedes escuchar si prestas atención, de ausencia de palabras... como si el mundo estuviera muerto, o quizás seas tú la que murió sin saberlo...
literatura, nada mas... de noches sin buenas noches, de noches sin dulces sueños... de indiferencia, de ausencia, de silencio que ahoga de palabras que te tragas una a una como si fueran pastillas para dormir... letra a letra... todo es lo mismo, o al menos tiende a terminar igual, en el olvido del olvido, en los silencios que gritan lo que no quieres escuchar... migraña, y dolores que los calores te recuerdan todos los años... migraña y los ojos que ven borroso, la luz que molesta por debajo de la puerta, y el silencio... nos hemos acostumbrado tanto al ruido de los coches que parece que no pueda dormir sin la nana que la ciudad me canta cada noche para que pueda dormir sin sueños... anoche escuchaba a van morrison eso de que tiene que decirte después que te quiere (esa canción que me sirvió para toda una novela) y no pude evitar preguntarme si después ya fue tarde... le dejaría de esperar la chica de ojos marrones? probablemente...
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1 comentario:

  1. calor y migraña es una mala combinación, cielo... sobretodo de noche, y más aún si estás sola y nadie impide que le des vueltas a la cabeza.
    la canción de van morrison es preciosa, no me extraña que te inspirara una novela... yo prefiero pensar que nunca es tarde para nada, pero a veces las evidencias se imponen y no te queda más remedio que admitir que perdiste ciertos trenes. además, una noche de insomnio no es buena consejera... deberían prohibirnos pensar en esos momentos...
    muchos besos guapísima!

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